La nueva ley de Formación Profesional contiene más de cincuenta palabras derivadas del vocablo "innovar"; nada extraño en los tiempos que corren y menos aún en una FP que tiene como uno de sus objetivos la generación de riqueza. La innovación entendida como ese arte de mudar algo -un proceso, un producto o un servicio- que incorpora nuevas ventajas para el mercado o la sociedad. Hasta aquí podemos entender que el nuevo Sistema de Formación Profesional aspira a crear nuevas oportunidades laborales a las personas a la vez que pretende satisfacer las necesidades formativas de las empresas. Pero, ¿dónde queda la educación integral de los futuros profesionales, más allá de los también reiterados términos relacionados con el emprendimiento, la digitalización y la sostenibilidad?
Antes de leer esta nueva ley apenas confíaba en que hiciera referencia a la necesidad de los conocimientos humanísticos por parte de los futuros estudiantes de Formación Profesional. Sin embargo, ya en su preámbulo, este texto reza: Al combinar escuela y empresa y situar a la persona en el centro del sistema, la formación profesional logra un adecuado equilibrio entre enseñanza humanística y formación profesionalizante. Da por supuesto que en la escuela la FP se preocupa por esos saberes humanísticos; algo alejado de la realidad mayoritaria de nuestras aulas, pero un buen comienzo con vistas al futuro.
En este mismo preámbulo también incide en el papel que ofrece la FP a los más jóvenes: Es necesario recuperar el prestigio social de la formación profesional como una vía de formación humanística y vocacional integral de los jóvenes. Una vía larga, como la de un ferrocarril, que con sus diferentes paradas a lo largo del recorrido permita a las personas bajar y subir en cada una de ellas en función de las circunstancias y ambiciones de cada cual. Sigue apelando al prestigio de la FP en su papel de enseñanzas con un carácter integral en un tren que hasta ahora no se ha preocupado mucho por ofrecer a sus viajeros un servicio de restauración con menús humanísticos.
A lo largo de la ley, ya no es hasta el artículo 45, que hace referencia a los ciclos formativos de grado medio y superior, donde se propone cierta optatividad en las estructura modular de los ciclos. Además de los módulos profesionales, los transversales (FOL y EIE) y el proyecto intermodular, se hace referencia a una parte de optatividad que atiende a las diferencias territoriales y personales en la oferta educativa: Las administraciones competentes determinarán, en su caso, módulos profesionales optativos que profundicen en mayor grado en el desarrollo de las competencias transversales tales como, entre otras, profundización en digitalización aplicada al sector, profundización en iniciativa empresarial y emprendimiento, lenguas extranjeras y profundización en desarrollo sostenible aplicado al sector, o que aporten los complementos de formación general para facilitar el seguimiento del itinerario formativo individual tales como, entre otras, ampliación de conocimientos humanísticos, ampliación de conocimientos científicos-técnicos, o habilidades sociales. Observamos de nuevo que se tiene en cuenta, aunque de un modo accesorio y voluntario, la importancia de la formación humanística de los futuros titulados de grado medio y superior.
Espero con paciencia ver cómo se hace realidad esta optatividad, al igual que cómo se vertebran en el currículo esos elementos básicos; tal y como afirma el artículo 13: Todo currículo de la formación profesional tendrá por objetivo facilitar el desarrollo formativo profesional de las personas, promoviendo su formación integral, contribuyendo al desarrollo de su personalidad en todas sus dimensiones, así como al fortalecimiento económico del país, del tejido productivo y su posicionamiento en la nueva economía, a partir de la cualificación de la población activa y de la satisfacción de sus necesidades formativas a medida que se producen.
A tal fin deberá incorporar contenidos culturales, científicos, tecnológicos y organizativos (...). La cultura como parte de esa enseñanza integral que, de una u otra manera, deberá incorporarse en los distintos títulos, certificados y acreditaciones.
Me parece un acierto esta inclusión de contenidos culturales y humanísticos; una FP que solo contemple las competencias técnicas supone mermar la educación de los estudiantes. Por ello entiendo que es imprescindible acrecentar la curiosidad del alumno por otros ámbitos distintos a los meramente laborales; a través de contenidos que faciliten el pensamiento crítico y una vida más plena a todos los niveles.
Desde los distintos módulos de formación profesional es posible motivar y acercar a los alumnos a los saberes humanísticos de forma que conecten con su realidad personal y profesional, así como con sus intereses. Conectar los conocimientos técnicos con las inquietudes humanísticas de docentes y alumnos es una posibilidad que deberemos aprovechar, de forma diferencial, en esta etapa educativa. En el cómo va a estar el quid del asunto. Citando a Nuccio Ordine en “La utilidad de lo inútil”: (...) ningún oficio puede ejercerse de manera consciente si las competencias técnicas que exige no se subordinan a una formación cultural más amplia, capaz de animar a los alumnos a cultivar su espíritu con autonomía y dar libre curso a su curiositas.
Espero que los nuevos presupuestos y el desarrollo reglamentario de esta ley, contemplen:
- La dotación de recursos humanos y materiales específicos a los centros educativos a través de planes de fomento a la lectura específicos para alumnado de FP, además de la creación y mejora de bibliotecas escolares con amplios y novedosos catálogos digitales y en papel.
- La inclusión en la formación inicial y permanente del profesorado el conocimiento de estrategias didácticas para el fomento de la lectura y el uso de otras artes (cine, música, pintura, literatura, danza, escultura, arquitectura) como recurso educativo transversal en las aulas de FP y desde cualquier módulo o ciclo.
El tiempo dirá si se cuida el espíritu de una nueva ley donde tenemos la oportunidad de modernizar un sistema de Formación Profesional necesitado de recursos económicos pero muy humanos.
0 COMENTARIOS:
Publicar un comentario
Disculpa las molestias si se demora la publicación de tu comentario. Se revisan para evitar el spam habitual. Muchas gracias.